martes, 14 de octubre de 2008

NUBES Y CLAROS

Me iré a Londres y te escribiré desde allí. Así de lejos me escucharás más cerca que nunca. Cada carta te remitirá a una dirección nueva... a una dirección nueva. Me pasaré las horas en silencio, y la inmersión en el idioma se reducirá a una expresión serena de ironía. Y más importante, la inmersión en el carácter será una baliza que evitará naufragios de fatal desenlace, una señal para ti.
Me sabrán agridulce los días interminables, viviré con la bruma matinal y tu cuerpo ardiendo en la planta alta de los autobuses rojos y fregando cacerolas más grandes que mi padre.
Todo es temporal, los musicales, los estrenos mundiales, el Royal Albert Hall mitificado, el Albert Memorial desconocido, ...y un junio a la tarde noche.