jueves, 19 de febrero de 2009

LA POSTERIDAD

Ahora veo un puerto deportivo a las once y media de la mañana, ahora que la luz del cd es la única luz en la casa. Obsesionado con un triángulo estival.
El infinito entre dos puntos, la densidad gráfica, un clásico concepto transalpino. Lo que queda de por medio es una vida extra, tranquilamente el éxito.
Tampoco mis parrafadas torpes sobre La Escapada impedían la sensación general de estar haciendo algo grande. Por encima de universos de marcas, de las émulas gimkhanas del joven del bigote, estábamos los hermanos y los amigos claudicando ante la media mañana derrotados por la faceta más feliz del viento mediterráneo, aires de poesía para la alopecia. Las bendiciones bien expresadas y la gente pasando eran el punto fuerte del más famoso del grupo.