lunes, 21 de diciembre de 2009

HISTORIA QUIEN LO LEA

Los bares dueños de la calle a iniciativa de los dueños de los bares. Murmuro títulos, insultos, poemas y nombres esdrújulos. Aquí nace un viaje increíble. Los relojes de sol, a la luz de la luna, han decidido proyectar una sombra de victimismo cuando el apagón de un sábado resuena de memoria en memoria, de los Fine Young Cannibals a las crecidas del río, de caras bonitas descontextualizadas a sabores salados de resaca, suena el ring del despertador y aparecen el orgullo y el arrepentimiento en el ring de la amnesia.
La elegancia invernal de Kandinsky, más su abandono de los pinceles cuando salía de su ciudad en marzo me impulsa a pensar en f(r)ases felices. Marzo, pudor y promesas.