lunes, 25 de julio de 2016

CUANDO HUELVA

Los alrededores del aeropuerto son marismeños, la luz cae flácida y se sincera primaria sobre algunos cangrejos sordos. Es muy tarde en el blog. Y es increíble que este juego sardónico me vaya a sobrevivir. No hay piloto consciente, en el momento de aterrizar, de que hubiera aquí mismo una balsa de fosfoyeso (los autobuses hacia Sevilla revelaban por un lado el páramo tóxico y, por otra luna, mis baldías copias de negativos retos sentimentales). "Aquí no tiene sentido estar, los aviones te sobrevuelan y tu blog te sobrescribe", dice mi asolanada cordura con la voz de una joven dama que se fue.

domingo, 10 de julio de 2016

SE TRASPASA UN PLANETA

Entonces apareció ella, guapa y lejana, ahí al lado. Fin de Francia y España. El outwriter contuvo el roce reflejo. Y lo contuvo con voluntad de hierro en una caja de seguridad de papel verjurado. La adrenalina archivada (eso era un poco triste) olía como a volátil naftalina. Ella asomó de nuevo sus ojos inclinándose amorosamente sobre el abismo de dos siglos enfrentados. Cuando cruzaron dos palabras estalló el síndrome de China entre sus vidas. Y ella dudó mucho y bien, té y café, entre su vuelo y el snack-bar. Aeropuerto de Sevilla, septiembre de un año que no ha ocurrido.