domingo, 22 de enero de 2017

'LEITDESMOTIV'

La primera vez que pensé en la nada fue en el patio del colegio siguiendo el vuelo taciturno de un balón que se embarcaba, pude escuchar cómo temblaban de miedo mis células más iluminadas. Tú dirás que este oído finísimo desaparece con los años. Yo sigo inventando platos para cuatro versiones de mi ego añorando una insensibilidad que no se impone. Tiro platos, corto pieles, enciendo extractores, enciendo ordenadores, quemo encimeras, busco quimeras en Spotify alusivas a una consciencia eterna. En las copas de los árboles de la Casa Colón está mi mirada de seis años. De sesenta y seis. De ochenta y uno. Conmigo acaba todo y sin mí nada fue.