lunes, 1 de diciembre de 2008

EL REGRESO ESTA VEZ SOLO

Mi ropaje intelectual quiere ser como el hilo (hilo) argumental de mi vida. Va perdiendo resistencia en relación con el comportamiento, yo, por eso su significación, voy perdiendo fuerza. Un hombre en las estrellas no piensa en otra cosa que en pisar tierra firme, otro en un ático pedregoso brinca junto a la baranda para ver un Partenón iluminado, arriesgando la bebida y la vida se resiste a la disimilación, recuerda. "Un minuto de atención, por favor, la situación es la siguiente: empiria y dramatismo". Al otro día, sin saber cómo, llegaría la reflexión más bonita del calvario: el sentimiento repetido no es resentimiento, amor.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Impresionante entrada.
Por cierto que tal el spot?

Dani V dijo...

Bien, bien.
Gracias un lote (sospechoso anglicismo, ¿a que sí?)

Anónimo dijo...

no estaría mal añadirlo a nuestro vocabulario particular. Al igual que "un pequeño "bit"".

Podré ver el spot

Ya sabes que no puedo ver una entrada tuya sin comentarla.

Rafa, es esto amor??

Rafa dijo...

De nuevo, hermano, en la vanguardia literaria. Arte y teoría del arte. El amor es la unica intromisión cierta en el tiempo y su devenir. Alterar la secuencia y fragmentar el discurso para hablar tangencialmente (ay Bartolomé Cabello..) del sentimiento. Como una imposible resaca luminosa. En el mundo real las copas caen de los áticos (y las piedras también). Nos encontrarán arriba o abajo? Seremos uno o seremos todos?
Un artículo del Boston Globe alerta sobre el nuevo comportamiento durante la crisis:“Mientras las crisis del ’29 fue algo público y participativo, algo que podía verse y sentirse en las calles, la depresión del 2009 será una experiencia menos visible y más aislada. Con la disminución de los precios de la televisión de pago y la proliferación de nuevos canales, se hará más fácil matar el tiempo a solas. Y el tiempo libre será algo que sobrará durante la depresión del siglo XXI. En lugar de las polvorientas familias de granjeros vagando por los caminos, el icono visual de la depresión moderna será algo tan sutil como el parpadeo de millones de televisores que nunca se apagarán mientras los desempleados sigan en casa, llenando sus días con la distracción más barata”.
Así pues, y siguiendo la moda de los anglicismos: yo tengo no dinero, lo que le da al hecho de no tener un estatus más activo, más civilizado, más respetable. Poder utilizar desde un punto de vista económico el no dinero, esa es la clave. Nadie debe subestimar la capacidad de un Viana para generar no dinero.

Se me olvidaba. Sí, esto es amor.